Por Cristofer Denis | Foto: Manu Heredia en twitter
En Europa ya nos encontramos en la ‘tierra derecha’ de las definiciones ligueras: en todos lados y en todas las categorías pasa algo. Pero, en la Primera RFEF (tercera categoría de España) raya en lo surreal y todo pasa por una cláusula que puede definir el ascenso.
El tercer peldaño del fútbol español está dividido en dos grupos geográficamente separados. En uno de ellos, está el histórico Deportivo de La Coruña que -por estas fechas-, es líder de su zona con 67 unidades, lo que le daría el ascenso directo (faltan cinco jornadas) con seis unidades por sobre el Barcelona ‘B’. Su rival de esta semana es el Arenteiro que si bien está a ocho puntos del playoff de ascenso, solo tiene un rival por encima.
Pero ¿Por qué toma relevancia esta historia? Por que en este partido operará “La clausula del miedo”.
Diego Rivas, sin querer, será el protagonista del domingo ante un club que conoce bien: el Deportivo de La Coruña
La clausula que puede definir un torneo
En el fútbol es normal ceder jugadores a otros equipos para que se fogueen. Hasta ahí no es novedad. Pero, si lo cedes a un equipo de tu misma categoría, sueles poner alguna traba para que no jueguen contra ti. El afectado en esta pasada es el propio Arenteiro que no podrá contar con un jugador cedido por el Deportivo de La Coruña, a raíz de esta clausula.
El Arenteiro no podrá contar con Diego García, su portero titular (se rompió un menisco); ni con el tercer arquero -que lleva una lesión larga- y su recuperación supera el partido ante el Depor que debe jugarse este domingo 28 a las 13 horas de Santiago.
Lo lógico sería que el cuadro de la provincia de Orense dispute su partido con el tercer arquero, pero no lo podrá hacer: el portero suplente es Pablo Brea, quien debería apagar el incendio, pero la clausula del miedo lo impedirá. Muy en simple, esta clausula evita que el cedido juegue ante el club de origen, pero hay una letra pequeña… Ya que muchas veces pueden jugar, pagando un extra. El Arenteiro ya dijo que no pagará y lo solucionó con lo que había en casa: el preparador de arqueros.
Diego Rivas (36) será quien se ponga los guantes: el ahora preparador de arqueros del cuadro gallego tendrá un contrato temporal y podrá jugar con su equipo. Y conoce bien la categoría: Rivas logró el ascenso el curso pasado con el Racing de Ferrol -otro cuadro gallego-, y además, tiene pasado deportivista.
¿Le resultará la maniobra al Arenteiro? El domingo lo sabremos.